Artículo de Pedro A. Urbina

Dentro de la colección dirigida por Manuel Álvarez Romero, especialista en medicina interna y titular del Servicio Andaluz de Salud, autor también de más de media docena libros prácticos y de éxito, presenta ahora este nuevo estudio sobre el perfeccionismo como una patología, y orientado a «superar un problema tan común y devastador». El otro autor del libro es Domingo García-Villamisar, psicólogo y profesor universitario, autor también de más de seis títulos, académicos y prácticos, sobre psicopatología.

La presencia del perfeccionista en la vida corriente y en los quehaceres habituales es algo muy común. Muy común la insatisfacción que se produce en determinadas personas por no conseguir una perfección utópica -sin que los interesados la consideren tal-, que ellos mismos se han marcado, o irritación constante por no poder mantener en su perfección y orden todo lo que les rodea: es una obsesión, que en repetidas ocasiones evidencia una neurosis. Esta mala tendencia nunca considera suficientemente acabado en perfección lo que se hace y, así, la ansiedad es ilimitada, y constante la animadversión hacia los demás, que juzga zafios, desordenados, mediocres, y hasta faltos de honradez y de sentido de la justicia y de responsabilidad.

No hay que confundir el deseo sereno de hacer las cosas bien, y cada vez mejor, que es algo conforme a la naturaleza humana, con este empeño inquieto, enfermizo, que tortura al mismo perfeccionista y a los que le rodean y no son como él. El libro desciende a multitud de casos prácticos de perfeccionismo, que hacen infeliz la vida de cada día, y podrían ser, al contrario, causa de satisfacción y alegría si se encauzara bien el deseo de perfección, los esfuerzos y motivaciones y fines en las tareas y trabajos cotidianos.

Esta enfermedad o transtorno de la personalidad es diagnosticado con elevada frecuencia en la práctica clínica profesional. Y un índice del aumento de esta anomalía es el gran número de publicaciones sobre el perfeccionista o el anancástico -de investigación, de divulgación y académicos- en estos últimos años.
Este libro analiza las variadas facetas del perfeccionismo, desde la presentación de meros rasgos perfeccionistas leves hasta la auténtica enfermedad; su tratamiento, medicación, concluyendo con orientaciones prácticas para aprender, con moderación y prudencia, a obrar bien.

El hecho de que el libro sea fruto de dos autores, aúna la clínica médica y la definición académica, orientaciones prácticas debidas a la experiencia y datos propios de una investigación madura.
El síndrome del perfecionista no sólo está dirigido al que sufre esta obsesión devastadora, con más o menos intensidad, sino a los familiares; a médicos, especialistas o no, y a padres y educadores.

Un libro, pues, muy útil y práctico, fundamentado en la ciencia y el estudio, y en la experimentación y clínica cotidianos con estos enfermos.